La implantología es una de las especialidades odontológicas que más ha evolucionado, gracias a las nuevas tecnologías y a los materiales utilizados actualmente, que permiten la #osteointegración, responsable del éxito en los tratamientos.

El material con el que se fabrican la mayoría de los implantes dentales es el #Titanio cuya característica principal es la de poder unirse firme e íntimamente al hueso humano. Gracias a esta propiedad es aplicado en la boca como pilar de soporte de diferentes tipos de prótesis. Es a esta propiedad a la que se le denomina Osteointegración.

Tanto los procedimientos quirúrgicos, así como los protésicos necesarios para completarlos, consiguen rehabilitaciones cada vez más eficaces y satisfactorias para los pacientes.

El Titanio es el protagonista

Durante los últimos años, se han producido avances biológicos y tecnológicos tan relevantes en la Implantología, que han determinado que el número de pacientes tratados con este método sea cada vez mayor.

Cuando la pérdida de una pieza dental es irremediable, en la mayoría de los casos, el implante es uno de los recursos más fiables para remplazarla.

El #titanio, en la medicina, tiene una larga reputación en el uso de implantes de cadera, reemplazos de rodilla, estuches para marcapasos y placas craneofaciales que el cuerpo humano acepta perfectamente.

El titanio es más fuerte y más ligero en peso en comparación con otros elementos como el acero inoxidable que también se ha utilizado extendidamente en medicina. También posee una gran resistencia a las cargas repetidas por lo que es ideal para su aplicación como un implante.

El titanio no suele generar reacción inmune siendo un material más resistente a la corrosión en comparación con otros. Además de la calidad de los materiales utilizados, los nuevos diseños de implantes mejoran la estabilidad básica en huesos que se presentan con baja densidad y permiten distribuir mejor las cargas biomecánicas.

Los Implantes son una solución apta para todos.

¿En qué casos aplicar implantes? ¿Falta una pieza?… o dos?… o la ausencia de piezas es total?… La respuesta es: SIEMPRE CON IMPLANTES. En este sentido, numerosos pacientes han sido tratados mediante la rehabilitación protésica con implantes osteointegrados con unos resultados funcionales y estéticos excelentes.

La Implantología se basa en la osteointegración y la misma ha proporcionado a la estomatología restaurativa nuevas perspectivas, ya que la colocación de los implantes simplifica la rehabilitación, sobre todo, en aquellos casos desdentados completos mandibulares muy reabsorbidos y tan difíciles de solucionar con las técnicas convencionales.

Y todo esto es gracias a la osteointegración que resuelve los problemas de estética, retención, soporte y estabilidad de las prótesis.

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Los tratamientos con implantes dentales

Los implantes dentales son esa opción terapéutica con la que se obtiene un anclaje firme para las prótesis al hueso y a los tejidos. Se trata de un tratamiento rápido y eficaz que devuelve la funcionalidad masticatoria en breve tiempo. Se realizan con anestesia local, de forma ambulatoria.

El tratamiento con implantes dentales, requiere de una serie de procedimientos complejos en los que se procede a estudiar y planificar desde la primera consulta, hasta el día de la cirugía, todo de forma integral, empezando por conocer el estado del hueso del paciente.

Cuando falta un solo diente se coloca un implante independiente, pero, cuando faltan varias piezas se puede recurrir a un puente soportado por implantes.  Y si faltan todas las piezas se fija una prótesis entera sobre un determinado número de pilares implantados.

Rehabilitaciones de alta gama ¡EN EL MISMO DÍA!

Una vez esté colocado el implante, se podrán acondicionar las prótesis con las que finalmente se recuperarán todas las funcionalidades.

Incluso en el mismo día se podrá realizar lo que se conoce como implantes de “carga inmediata”, una técnica en la que es posible colocar la prótesis de forma inmediata a la implantación del implante. Será el odontólogo quien decidirá si es posible hacerlo o no, según la evaluación inicial que reflejará las condiciones del paciente. Dependerá, entre otras cosas, del tipo del hueso, del procedimiento quirúrgico y otros factores propios de cada persona.

La recuperación es rápida y suele ser sin complicaciones. Se trata de un tratamiento multidisciplinar donde intervienen especialistas en cirugía, prótesis y laboratorio dental, trabajando en equipo para devolver la funcionalidad y estética de toda la boca.

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